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Mi nombre tiene contexto religioso el cual está además, enlazado con un personaje bíblico, Jeremias, quien fue el último profeta que Dios envió a predicar el reino del sur, formado por las tribus de Judá y Benjamín. Detrás de su origen habla sobre cómo el señor asignó a Jeremías para transmitir las palabras de Dios al pueblo y a sus dirigentes.

Así como Dios le asignó la tarea a Jeremías llevar el mensaje, llegue yo a un hogar para despertar las emociones que rodeaban a mi tía paterna, mis tíos, y mi padrino . Las risas en mi familia era algo que me causó gracia es que según mi madre cuando yo tenía un año de edad y
apenas sabía agarrar fuerzas para balancear mi cuerpo, por más lejos que estuviese siempre salía corriendo en mi carrito porque ya sabía que mi papá había llegado a casa. Un detalle interesante que descubrí es que mi papá deseaba que fuera niño, irónico porque después de que nací mi papá era más apegado a mi que nadie. Esta investigación sobre lo que pasaba mi familia antes de que naciera me hizo sentir que fui una niña deseada y esperada por mis padres.

El significado de mi nombre es “Exaltada de Dios” o “Designada por Dios,” responde al nombre de uno de los profetas mayores del Antiguo Testamento , el autor del Libro de Jeremías y del Libro de las Lamentaciones (supuestamente). Vivió para ver la destrucción babilónica de Jerusalén en el siglo VI a. C. Un dato interesante relacionado con mi nombre es que en Dinamarca se celebra el día del nombre Jeremías. Es más popular en England and Wales y Estados Unidos. El nombre Jeremías se registró por primera vez en la Biblia. Mi nombre se utiliza para género Femenino y masculino. La variación lingüística que encontré para mi nombre fue el hebreo antiguo. Hebreo: Hieremias , Griego: Yirmeyahu, Alemán: Geremia, Español: Jeremías. Mi nombre tiene diferentes formas de escribirse, y cuenta con muchos simbolismos bíblicos. Su pronunciación es distinta dependiendo del país.

El origen de mi nombre se conecta con mi identidad porque desde pequeña he crecido con la firme convicción de que hay un Dios entre nosotros que siempre y mi familia es muy devota de la religión. El significado de mi nombre que más me gustó fue el de “nacida para ser
libre”. Lo que pienso de la selección de mis familiares es que es muy único y no tan común, también me gusta que tenga una historia vinculada con la religión y significados que me representas como persona. Si tuviera la oportunidad de hacerle un cambio a mi nombre realmente no consideraría ninguno porque me siento cómoda con ambos. El día de mi bautizo mi tía decidió presentarme con un nombre que plasmara la delicadeza de la feminidad. El clap! clap! de los aplausos de mi familia resonaban por el hospital al escuchar con éxito mi llegada. Una noche nublada, decidí alegrar la vida de mi madre sin previo aviso, así como una mariposa viendo por primera vez el mundo. Mientras mis amigos hacían retumbar la casa con sus felicitaciones y risas, yo observaba las enormes velas distribuirsu brillo en medio del pastel. Un día sin más me abrieron paso a un mundo en donde nunca pertenecí en busca de un mejor futuro. Algo que aprendí sobre mi nombre que no sabía antes es que es derivado de un nombre popular en la religión.

El origen de mi nombre se conecta con mi identidad porque desde pequeña he crecido con la firme convicción de que hay un Dios entre nosotros que siempre y mi familia es muy devota de la religión. El significado de mi nombre que más me gustó fue el de “nacida para ser libre”. Lo que pienso de la selección de mis familiares es que es muy único y no tan común, también me gusta que tenga una historia vinculada con la religión y significados que me representas como persona. Si tuviera la oportunidad de hacerle un cambio a mi nombre realmente no consideraría ninguno porque me siento cómoda con ambos.