Sorry

Hace 2 años llegué aquí a Estados Unidos buscando un mejor futuro con toda mi familia, ya que en mi país no había condiciones de vida. Cuando recibí la información de que iba a un nuevo país, entendí la decisión que tomaron mis padres. Pasamos 3 años esperando todos los papeles, por supuesto, con más ansias que nunca, con la esperanza de poder tener una vida mejor. Finalmente, el día llegó después de tanta espera y tantos días de madrugada en lugares diferentes para poder completar los papeles.

A veces, una de las cosas que más duele es cuando llega el día que tanto esperaste. Es difícil despedirte de tu familia y no saber si la volverás a ver o no, despedirte de tu casa, de tus lugares favoritos, y ver todos los recuerdos de tu infancia irse contigo solo como una memoria. Despedirme de mi familia fue una de las cosas que, a día de hoy, me duele más: la familia que siempre estuvo conmigo en las buenas y en las malas, las comidas con mi familia, y los cumpleaños.

Cuando llegamos al aeropuerto, era una emoción con tristeza, ya que por fin estábamos donde tanto habíamos esperado. Al llegar a tierra firme en los Estados Unidos, se sintió diferente saber que, a partir de ahí, llegaba un mejor futuro, una nueva vida; todo daba un giro extremadamente grande. Pasamos un buen rato haciendo el equipaje y, finalmente, salimos de allí. Nos encontramos con nuestros tíos esperándonos con mucha alegría, ya que no los veía hace más de 10 años.

Las primeras vistas fuera eran todo muy grande y nuevo, ya que conozco otros países, pero todos son diferentes en muchos aspectos. Yo aún estaba conmocionada, ya que en mi mente solo era como una semana de vacaciones, no algo permanente. Mi día iba súper bien; era como estar de vacaciones con mi familia, conocer cosas nuevas, comer comidas diferentes y pasar momentos en lugares diferentes.

Me fue complicado al momento de empezar la escuela, conocer personas nuevas y un idioma nuevo. Me fue difícil aceptar esa parte, pero tenía que entender que, si quería un mejor futuro, tenía que arriesgar todo y dar lo mejor de mí, ya que no iba a dejar ir esta gran oportunidad de poder lograr lo que quería. Al principio, me fue bastante difícil con el idioma, ya que no era algo fácil. Conocí gente nueva que me ha ayudado con todo desde el primer momento. Con el paso del tiempo y los meses, fui adaptándome a lo que ahora era mi nueva vida, mi nuevo hogar y mis grandes sueños, que con el tiempo iré cumpliendo.

Después de 1 año en este nuevo país, después de tanto tiempo, volví a mi país. Fue una sensación de tristeza y alegría: tristeza por ver mi país tan diferente y sin vida, y alegría por ver a mi familia y ver lugares que me hicieron tan feliz en su momento. Fue algo especial comer con mi familia, disfrutar de la comida familiar y ver esas caras llenas de alegría solo por verme de nuevo.