Sorry

Todo puede cambiar cuando menos lo esperamos, de un momento a otro la vida nos  puede dar un giro tan inesperado que ni siquiera nos da tiempo a procesarlo y lo unico que queda es aceptar y tratar de seguir adelante como podamos. Hoy estamos aqui pero solo Dios sabe donde estaremos manana.

Naci en la ciudad que los cubanos conocemos como la tierra caliente, Santiago de Cuba. Creci con mis abuelos y mi mama ya que mis padres se separaron cuando yo era muy pequeña y a los 6 años mi papa vino para los Estados Unidos. En ese momento yo no entendia lo que eso significaba y hoy me arrepiento de no haberme dado cuenta antes que tarde o temprano yo también dejaría mi país. 

Mi infancia al igual que la parte de mi adolescencia que pasé allí las considero la etapa más feliz de mi vida y le doy gracias a Dios por las personas que conocí durante ese tiempo y que hoy en día considero mi familia porque aún cuando todos hemos tenido que ir por caminos diferentes seguimos hablando y manteniéndonos en contacto como si la distancia no existiera.

Desde que yo era pequeña mi mamá siempre estuvo haciendo trámites para sacarme mi ciudadanía española y eventualmente irnos del pais, cosa que duró tantos años hasta el punto que me acostumbré a saber que el propósito de todos esos papeles era sacarnos un día del país pero nunca fui realmente consciente que en algún momento iba a tener que dejar atrás toda mi vida, mis amigos y todo lo que conocía hasta ese momento por empezar de cero en otro lugar, y mientas los años seguían pasando ese momento se acercaba cada vez más mientras que yo seguía ignorándolo. Pero como todo en la vida, la espera tenía fin y tuvo que llegar nada más y nada menos que casi al final de mi último año de secundaria. El año que me iba a graduar con mis amigas, el año que nos habíamos pasado haciendo planes para cuando por fin entráramos al pre, el año que por fin íbamos a cumplir 15 todas juntas, el que hubiese sido el mejor año de mi vida. 

Abril del 2023, a tan solo pocos días de que la primera de mi grupo de amigas hubiese tenido su fiesta de 15 y faltando menos de un mes para mi cumpleaños, regreso a mi casa una tarde cualquiera después de la escuela y me encuentro con mi mamá haciendo una llamada. Cuando cuelga me dice que muy probablemente en menos de un mes nos fuéramos del país, en ese momento traté de pensar lo más positivo que podía y de actuar calmada porque sabía que eso no solamente era difícil para mí sino también para mi mamá. Ni siquiera me preocupé por avisar a nadie, solo pensé en que todavía me quedaba un mes y que iba a tener suficiente tiempo para despedirme de mis amigas y mi familia, pero no fue así. Mi mama siguio haciendo llamadas y ese mismo dia por la noche me dijo que la unica oportunidad que ibamos a tener era un vuelo que salia desde la Habana la proxima semana, el unico problema, nosotras no viviamos en la Habana, asi que teniamos que irnos en el primer bus que saliera desde santiago a la Habana y ese resulto ser al otro dia por la tarde. Pase de tener un mes, a tener menos de 24 horas para despedirme. Recuerdo que eran alrededor de las 8 de la noche y empece a llamar a mis amigas. Ellas reaccionaron de la mejor manera y me dijeron que todo iba a estar bien y que no iban a ir a la escuela al otro día para poder despedirnos por la mañana. Esa noche no dormi, no paraba de pensar en que en tal solo unas horas dejaria toda mi vida atras para siempre, no dejaba de preguntarme por que tenia que suceder todo tan rapido y principalmente pensaba que no tenia suficiente tiempo. En cuanto el sol salio me levante de la cama y empecé a hacer las maletas porque ya no podia estar sola con mis propios pensamientos. Mi mama tambien se levanto y empezo a ayudarme, alrededor de las 7 sali a encontrarme con mis amigas y solo pudimos vernos por una hora antes de que mi mama pasara a buscarme para ir a ver a mis abuelos. En un abrir y cerrar de ojos ya estabamos en la Habana.