Sorry

Hola, me llamo Jennifer, tengo 17, y vengo de Cuba. Hace un largo tiempo me fui de Cuba con mis padres, dejando a mi familia y a mi hogar atras para venir a EE.UU. Al principio no fue tan malo ya que pude cumplir mi deseo de volar en un avion, pero el viaje desde Nicaragua hasta la frontera de Mexico y EE.UU fue muy duro. Tuve que pasar dias en habitaciones con mucha gente que no conocia, tambien viajaba en transportes muy llenos y apretados y algunas veces incluso me mareaba, fue una travesia dificil, hasta llegue a perder el apetito y la esperanza. Pero no podia quejarme, a fin de cuentas todo ese duro viaje valio la pena ya que aunque llegue a sufrir mucho durante mas de un mes, pude alfin llegar a Florida. Ahora mis padres y yo tenemos una casa propia y casi no tenemos problemas para adaptarnos a la vida en este pais. La leccion que quiero mostrar en esta historia es que no importa lo que pase, no importa que problemas tengamos que enfrentar, debemos seguir adelante ya que la vida sigue y no conseguiremos nada si nos echamos para atras, para aquellos que tienen problemas y creen que ya no tiene sentido vivir, no se tienen que poner asi, porque si seguimos de frente sin darnos por vencidos podemos conseguir cumplir nuestras metas.